Veracruz, Ver.

     
De un plumazo


Consulta

Lunes 2 de Agosto del 2021

Los análisis de un amplio sector de la opinocracia se inclinan por el estrepitoso fracaso de la Consulta Popular impulsada temprana y originalmente por el presidente Andrés Manuel López Obrador para etiquetar, personalizar e identificar a sus adversarios, conformarlos en un bloque y amarrarlos a la hoguera de la muchedumbre para ser quemados en moderna inquisición juarista.
Cuando AMLO se percató que sin nombres ni apellidos de los cinco enemigos públicos del pueblo bueno no podían, por mandato de la SCJN aparecer en la papeleta, abandonó el barco de la consulta e intensificó sus criticas y diatribas al Instituto Nacional Electoral en anticipado lavado de manos.
¿Fue un fracaso para AMLO la consulta?
No.
Fue un fracaso para la democracia participativa que debe hacer imprescindible se hace imprescindible incluir a los ciudadanos en los procesos deliberativos, de discusión y decisionales de una nueva gestión pública, con mayor participación ciudadana.
Nos perdimos 520 millones de pesos que costó la consulta; pero también la oportunidad de estrenarnos en un modelo democrático donde países como Brasil, Perú y Chile nos han dejado atrás.
Perdió el Movimiento de Regeneración Nacional que sin la directriz de AMLO es un cascajo a la deriva, cuerpo sin alma, tigre de paja, embarcación a la deriva sin más destino que el beneficio patrimonialista de dirigentes que no tienen ni la más mínima de idea de lo que es la democracia participativa.
Andrés Manuel López Obrador ganó con este nuevo cascabel distractor, abonó a su doctrina política porque los odios hacia los órganos e instituciones acrecentarán aún más el dogma de la 4T.