Veracruz, Ver.

     
De un plumazo


Petate del muerto

Martes 17 de Septiembre del 2019

Sin ánimo de enderezar campañas de defensa o ataque de nadie, la movilización de legisladores panistas para sacar de la silla a Cuitláhuac García Jiménez, es un mero chiste mediático.
Después del grito 209 de la independencia de México, los panistas amanecieron con el ánimo de joder al vecino.
Y se inventaron una campaña para enderezarle juicio político al maestro Cuitláhuac García Jiménez, quien cobra sus quincenas como gobernador de Veracruz de Ignacio de la Llave.
«Veracruz es un estado fallido» gritan los panistas en el día 291 de la administración del ingeniero García Jiménez.
Se les olvidó que Cuitláhuac García Jiménez recibió un millón 665 mil 885 votos que lo tienen, a fuerza de sufragios, en «la plenitud del pinche poder» (Fidel Herrera Dixit).
En un ataque de amnesia, no recuerdan que el millón 453 mil 722 sufragios cosechados por Miguel Ángel Yunes Márquez, candidato de la alianza Por Veracruz al Frente (PAN/PRD), no le alcanzaron para llegar a la silla principal de Palacio de Gobierno.
Olvidan los azules obviaron que Cuitláhuac García venció en la urna por 212 mil 163 votos a Miguel Ángel Yunes Márquez.
Así de simple, así de conciso, preciso y macizo es el resultado de la decisión sexenal de los veracruzanos.
Los puestos de elección popular son irrenunciables; se ganan con votos, no con bravatas trasnochadas.
Hay que ser dignos en la derrota; preparar el camino para la intermedia.