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Desesperanza |
Jueves 5 de Enero del 2017
Después del caos total, vino una noche aciaga, nadie durmió igual que antes.
Las calles se observan vacías. La gente se ha ido. En las casas reina la desesperanza, como cuando no se acierta a donde ir o que hacer, más que esperar que rumbo tomarán las cosas.
La situación se ha desbordado. 14 mil autobuses urbanos que movilizan a la fuerza laboral del estado de Veracruz, están parados.
De la horda de saqueadores a la rebelión social.
Las próximas horas serán difíciles para la población.
Este es el punto de quiebre para el sistema.
El PRI se clava asimismo en la cruz del desprecio colectivo.
El presidencialismo ha muerto.
El orden se ha marchado a saquear las tiendas, con el paliacate del anonimato en el rostro.