Veracruz

Martes 5 de Octubre del 2021

La visita presidencial que atestiguó los 200 años de la conformación de nuestra Armada de México, sirvió para reactivar la economía, el valor cívico, el orgullo de ser veracruzanos valientes, trabajadores, resilientes; sobre todo, representó un bálsamo para el espíritu, una promesa de que las cosas mejorarán en lo que llamamos normalidad.
A partir del 20 de noviembre se abrirán los eventos masivos, la gente tiene necesidad de reunirse, despejarse, divertirse, olvidarse de esta pandemia maldita.
El despliegue castrense nos motivó a salir, a respirar la brisa marina, a revalorar nuestro cuatro veces heroico Puerto de Veracruz.
Ya en la mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador volvió a cargar contra la Torre Centro, armatoste de concreto y hormigón que atenta contra la historia misma del Puerto de Veracruz, de sus batallas contra el enemigo, de sus edificaciones como San Juan de Ulúa, donde alguna vez estuvo preso Benito Juárez.
Quizá haya que apuntalar al presidente para unirnos, como en el pasado ante las invasiones de ejércitos extranjeros, y luchar para rescatar nuestro centro histórico, donde un poco más de 600 edificios históricos se caen a pedazos, la piedra múcura se diluye con el tiempo y con esa erosión se va nuestra grandeza, nuestra historia.
No permitamos eso. No nos dejemos vencer.