Bulevar

Miercoles 5 de Septiembre del 2018

El bulevar veracruzano Manuel Ávila Camacho concentra muchas historias.
El tramo de este manicomio con vista al mar, encierra triunfos, pero también fracasos políticos.
Un buen día, alguien le vendió la idea al gobernador Miguel Ángel Yunes que remodelar el bulevar, armonizándolo arquitectónicamente con el llamado «Distrito Boca», sería un hitazo proselitista en las elecciones del domingo 1 de julio.
El 1 de octubre del 2017, anunció con bombo y platillo la inversión de 150 millones de pesos para remodelar el viejo bulevar de los porteños.
Craso error.
Boca del Río no posee la historia del Puerto de Veracruz.
Los porteños se sintieron ofendidos ante la destrucción de un espacio público en buenas condiciones, de que no se les tomara en cuenta para hacer una obra que exaltara la figura del hijo mayor del gobernador, candidato a la gubernatura.
Y se lo cobraron en las urnas.
En el «Distrito Boca» el bulevar fue un éxito. En el Puerto, un fracaso político cuyos costos aún sigue pagando el alcalde Fernando Yunes Márquez.
El nuevo bulevar es un muro de contención, un tapón para el desfogue de las aguas de lluvia.
La estética boqueña riñe con la funcionalidad en el nuevo bulevar que nos costará 150 millones de pesos.
Nadie quiere el nuevo bulevar.
Los porteños quieren de regreso sus historias contadas, vividas en noches etílicas de su bulevar.