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Guerra sucia |
Lunes 15 de Mayo del 2017
La estrategia seguida para bajar la intención de voto generada por Andrés Manuel López Obrador, es incorrecta.
Los modelos de campaña negra están muy vistos; tanto que a botepronto se nota un maridaje entre el PRI y el PAN para bajar al tabasqueño.
Estas estrategias se aplican desde 2006. Ya el electorado las conoce, por tanto, las desecha, más ahora con las redes sociales que juegan un papel de libertad de expresión espontánea.
La burda acción de arrojarle huevos en un acto proselitista en Córdoba, arrastra un tufillo similar a al show que le montó un grupo de travestis al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas cuando era candidato a la presidencia de la República, el miércoles 22 de septiembre de 1993.
El modus operandi es el mismo.