El Economista / CDMX / Viernes 29 de enero del 2021
La economía mexicana registró en el 2020 su mayor contracción desde la crisis de 1932, a causa de los efectos de la crisis sanitaria por el Covid-19, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La estimación del Producto Interno Bruto (PIB), del Inegi, arrojó que el año pasado los efectos de la crisis del Covid-19 provocaron que la actividad económica cayera 8.5% anual, con cifras desestacionalizadas, su mayor caída desde hace 88 años, cuando se contrajo 14 por ciento.
De confirmarse el dato, el próximo 25 de febrero, la caída del PIB quedaría por encima de la proyectada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, de 8.0 por ciento.
La contracción de la economía mexicana fue algo que se espero como consecuencia de las medidas que se implementaron para mitigar los contagios del Covid-19. Tanto en México como en el mundo se llevó a cabo el distanciamiento social y confinamiento, con lo cual varios negocios cerraron de manera temporal y, a su vez, afectaron los ingresos de los mexicanos, los cuales también llegaron a perder sus empleos.
Con los datos divulgados por el Inegi también se mostró que México hiló dos años de contracciones. En el 2019 se contrajo 0.1 por ciento.
La información del Inegi también reveló que, en comparación con en el mismo trimestre del 2019, el PIB mostró una contracción de 4.6% en el cuatro trimestre del año pasado.
En comparación con el trimestre previo, registró una recuperación de 3.1 por ciento.
Actividades agro, las únicas que crecieron
Por rubro de actividad económica se mostró que el sector primario fue el que mejor resiliencia tuvo a los impactos del Covid-19, ello debido a que fue considerado dentro de las actividades esenciales desde el inicio de la pandemia, por lo que no cerró.
De esta forma, la actividad primaria mostró un crecimiento anual de 2.0% en el 2020.
En contraste, el sector secundario fue el que mostró la caída más profunda. El año pasado, las industrias tuvieron una contracción de 10.2 por ciento. En cuanto al sector terciario, que está relacionado a los servicios, la contracción fue de 7.9 por ciento.