Alejandro Ávila / Boca del Río, Ver. / Miercoles 24 de junio del 2020
El dueño de la franquicia que perteneciera a los Tiburones Rojos de Veracruz hace apenas un año, Fidel Kuri Grajales, se presentó la tarde de este miércoles en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado con sede en el municipio de Boca del Río, misma que se ubica en el bulevar “Adolfo Ruiz Cortines”, toda vez que debe declarar sobre un presunto caso de violencia de género que habría ejercido en la Federación Mexicana de Futbol.
Kuri Grajales, quien se mantiene en un pleito legal en contra de la Federación Mexicana de Futbol y la Liga MX por la desafiliación de la cual fue objeto, y de la cual asegura fue una total arbitrariedad, recibió durante este litigio, una denuncia por parte de Anna Peniche, directora de Asuntos Jurídicos de la FMF por presunta violencia de género.
La abogada del orizabeño, María de Jesús Camacho Sánchez, negó previo a la comparecencia, que existas elementos para que su defendido sea un presunto acusado de ejercer violencia de género en contra de Anna Peniche y la denuncia es un simple distractor de la denuncia original que hizo Fidel Kuri en contra de ella, por fraude y falsificación.
“La señora pide unas medidas precautorias de protección, pero ella vive en el Estado de México, viene a Veracruz a formular una denuncia, presenta su escrito de denuncia y va a los medios a Notiver, con su sello de recibido a hacer pública la denuncia que está presentando, como una forma de distracción, en realidad”.
“Sin embargo, cuando hablamos de problemas de denuncias de género, estamos hablando aquí de una situación verdaderamente improcedente, no hay nada en contra de la señora en su carácter de mujer. Aquí estamos hablando de una persona que cometió un fraude, que falsificó documento, que se produce con falsedad en declaraciones judiciales y declaraciones emitidas ante autoridades”, asestó.
Es por ello, que Camacho Sánchez, recalcó que todo este presunto tema de violencia de género, se debe a un simple distractor de la denuncia en su contra, pues se le acusó de forma directa de ejecutar y ser cómplice de un daño directo al Club Tiburones Rojos de Veracruz.
“Lo que está haciendo es venir y presentar una denuncia, que pretende distraer y hacerse víctima, como víctima de género, no existe tal victimización. Lo que sí queremos es que quede muy claro, que no se vale, como se dice en el argot popular, que los patos le disparen a las escopetas. Estamos hablando de una delincuente, de una defraudadora”, culminó.