El País / Washington, EU / Viernes 22 de mayo del 2020
El que fuera mayordomo de la Casa Blanca bajo 11 administraciones, Wilson Roosevelt Jerman, falleció el pasado 16 de mayo a los 91 años a causa del coronavirus, según informó el jueves su familia a medios estadounidenses. Jerman entró a trabajar en la Casa Blanca en 1957 con el republicano Dwight D. Eisenhower (que presidió Estados Unidos entre 1953 y 1961) y se retiró en 2012, durante el mandato del demócrata Barack Obama (2009-2017).
Aunque empezó como limpiador, tardó poco en ocupar el puesto de mayordomo, un ascenso promovido durante la presidencia de John F. Kennedy (1961-1963), según reveló una nieta de Jerman a la afiliada local de la cadena Fox News en Washington. Fue la propia primera dama de EE UU, Jacqueline Kennedy, quien reconoció su trabajo y lo ascendió a mayordomo.
Otra nieta, Shanta Taylor Gay, lo describió a la CNN como una persona que “nunca habló de política” en casa. “Era un hombre tranquilo, pero severo. Muy generoso, nunca se molestó ni se quejó. Siempre aseguró que vivió una vida bendecida”, afirmó Taylor. La muerte de Jerman ha provocado el lamento de varias familias de presidentes, como los Obama, los Bush o los Clinton.
“Su servicio a los demás, su disposición de ir más allá por el país que amaba y todas las personas en cuyas vidas estuvo, es un legado digno de su espíritu generoso", ha asegurado en un comunicado la ex primera dama Michelle Obama. "Tuvimos la suerte de conocerlo. Barack y yo enviamos nuestro sincero cariño y oraciones a su familia”, añadió. Una de las hijas del presidente George W. Bush (en la Casa Blanca entre 2001 y 2009), Jenna, destacó la labor que Jerman hizo para ellos. “Lo amábamos, mi familia lo quería, y vamos a echarlo mucho de menos”, agregó.
La excandidata demócrata a la presidencia de los Estados Unidos, Hillary Clinton, también dedicó el jueves unas palabras a su antiguo empleado a través de Twitter, dando las condolencias a sus familiares. “Hizo que generaciones de familias presidenciales se sintieran como en casa, incluida la nuestra", recordó la que también fue primera dama desde 1993 a 2001.
Cerca de 95.000 personas han muerto en Estados Unidos a causa de la pandemia de la covid-19, una enfermedad que ha afectado de forma desproporcionada a los afroamericanos como Jerman. Ciudades como Chicago han registrado la mayor brecha: los negros son el 30% de la población, pero sufren el 70% de los fallecimientos por la pandemia.