Veracruz acabó con maldición de 41 partidos,derrota al Puebla

Mediotiempo / Veracruz, Ver. / Martes 29 de octubre del 2019

¡La maldición terminó! Veracruz por fin ganó tras derrotar 1-0 a Puebla en el Luis de la Fuente, con un gol de Colin Kazim Richards al 48’ y la marca negativa sin triunfo quedó en 41 partidos, por lo que no alcanzaron los 43 juegos del FC Chernomorets Burets de Bulgaria.

En la primera parte hubo muy poco por destacar entre los dos peores equipos del torneo, que confirmaron porqué se encuentran en el fondo de la tabla general y como simples comparsas en el A2019 del resto de los clubes de la Liga MX.

Un tiro libre de los Camoteros, que Jurado detuvo en dos tiempos, y un cabezazo de Colin Kazim Richards en el área, que Vikonis sacó a una mano sobre la línea de gol, fue todo lo que ocurrió durante los primeros 45 minutos.

El reflejo de la desconfianza que atraviesan los escualos se dio al 35’, cuando Luis Lozoya recibió una pelota en el área frente a la portería poblana y en lugar de rematar a gol, el dorsal ‘20’ de los jarochos prefirió dar un pase hacia atrás a otro compañero.

Al inicio de la segunda mitad, Veracruz dio el golpe a la Franja por medio de Richards, luego de que Lozoya sacó un servicio elevado por derecha al área, Carlos Rodríguez no midió bien la pelota y el zaguero poblano se techó en la jugada por lo que el balón llegó al inglés, quien controló con el pecho y de pierna derecha fusiló al guardameta Vikonis.

El 1-0 estaba en el marcador al 48’ y el festejo fue total entre los jugadores de los Tiburones Rojos y la fiel pero sufrida afición en la tribuna, que a pesar de toda la situación que atraviesa su club, se ha mantenido a pie firme.

Sebastián Jurado evitó el empate al 55’, cuando Leobardo López estuvo cerca de hacer un autogol tras un servicio raso y potente de Angulo por derecha, que el capitán jarocho desvió en su afán por despejar, pero el arquero estuvo atento para desviar.

Todavía al 84’ Colin Kazim estuvo a punto de anotar su segundo gol de la noche, tratando de realizar un recurso de lujo en un taquito al arco que Néstor Vidrio estuvo atento para tapar y no permitir que Veracruz aumentara la ventaja.

Los últimos cinco minutos de reposición fueron de nervio puro, pero al silbatazo final de Diego Montaño, el festejo se desató a pesar de que apenas llegaron a siete puntos y continúan en el último lugar del torneo.