El País / Los Ángeles , California / Jueves 7 de marzo del 2019
El departamento de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) creó una base de datos de decenas de personas “sospechosas” de ser “organizadores, coordinadores e instigadores” y periodistas que cubrieron la última caravana de inmigrantes centroamericanos que llegó a Tijuana el pasado noviembre. En algunos casos, el Gobierno de Estados Unidos colocó una “alerta” en sus pasaportes.
La cadena NBC7 de San Diego, California, publicó en exclusiva imágenes de la lista, elaborada por el grupo de “operaciones en el extranjero” de la policía fronteriza del sector de San Diego. Los documentos llevan el sello de la Unidad de Enlace Internacional, que es la que coordina la inteligencia entre Estados Unidos y México, explica la información. La fuente anónima que ha revelado el documento dice que esa base datos la comparten CBP, la policía migratoria (ICE), la patrulla fronteriza y el FBI.
El pasado noviembre, alrededor de 5.000 inmigrantes centroamericanos llegaron a la frontera de California dentro de lo que se llamó caravana migrante. Con ella llegaron a Tijuana periodistas, abogados y activistas de los dos lados. La caravana, organizada por activistas para atravesar México con seguridad y llamar la atención sobre la crisis humanitaria en Centroamérica, es una obsesión para el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que la ha utilizado para reforzar su discurso de que hay una crisis de seguridad en al frontera y hay que construir un muro. El mes pasado, Trump declaró una emergencia nacional para desviar recursos militares a la frontera.
El documento revelado este miércoles fue elaborado bajo el paraguas de la “Operación Asegurar la Línea”, una operación diseñada para vigilar la caravana migrante, según la fuente de NBC7. La lista debería servir para señalar a personas que debían ser examinadas en la frontera. La lista se compone de 57 personas. Diez de ellas son periodistas, siete estadounidenses, dos españoles y uno mexicano.
De cada uno aparece la fotografía de su pasaporte, país de origen y su supuesto papel en la caravana. De algunos aparecen sus datos de redes sociales. También aparece información sobre si su pasaporte ha sido “marcado” y consecuencias de esta acción. Algunos han sido “arrestado por el Gobierno de México”, “visado revocado”, “entrevista pendiente”… Según la fuente de NBC7, de cada uno hay además un dossier.
En los primeros meses de este año, México ha negado la entrada al menos a dos abogadas estadounidenses que atendieron a los inmigrantes y a dos periodistas que cubrieron la caravana, sin revelar las razones para esa negativa. La información de NBC7 de este miércoles viene a confirmar las sospechas de estas personas de que sus pasaportes fueron marcados por el Gobierno de Estados Unidos, aunque no permite relacionar directamente las dos cosas.
Las dos abogadas son Nora Phillips y Erika Pinheiro, de la organización Al Otro Lado, que asesora a inmigrantes en Tijuana sobre el proceso para pedir asilo en Estados Unidos. Según contó Phillips el mes pasado a Los Angeles Times, el 31 de enero viajó con su familia a Guadalajara. En el aeropuerto, los agentes de inmigración mexicanos la separaron de su marido y su hija y la tuvieron retenida durante nueve horas hasta que la devolvieron en un vuelo a Los Ángeles. Los agentes le dijeron que había una alerta asociada a su pasaporte e insinuaron que esa alerta no provenía de México. Ninguno de los dos países quiso confirmar la historia.
La abogada Erika Pinheiro aseguró que le había pasado lo mismo en la garita de San Ysidro el 28 de enero. México le negó la entrada a pie cuando iba a recoger a su hijo de 10 meses en Tijuana.
En la lista publicada este miércoles aparece una tercera abogada de Al Otro Lado, Nicole Ramos. En su ficha se indica que su pasaporte no ha sido marcado. La cadena de televisión asegura que ha podido ver un dossier sobre Ramos en el que aparecen detalles como su coche, el nombre de su madre y su historial laboral. "Los documentos parecen demostrar lo que hemos asumido desde hace un tiempo, que estamos en una lista de las fuerzas de seguridad diseñada para tomar represalias contra defensores de los derechos humanos que trabajan con los que piden asilo y que critican las prácticas de CBP que violan sus derechos", dijo Ramos tras ser contactada por la televisión.
Además de Al Otro Lado, en los documentos aparecen activistas de otras organizaciones como Border Angels y Pueblo Sin Fronteras, dice la información.
Los periodistas describieron situaciones similares. La fotógrafa freelance Kitra Cahana, que pasó seis semanas fotografiando la caravana migrante y cuyo trabajo se ha publicado en The New York Times y National Geographic, no pudo entrar en México a través del aeropuerto de Guadalajara en enero. Un agente de inmigración le dijo que su pasaporte había sido puesto bajo alerta por “los americanos”, según contó a Los Angeles Times hace un mes. Cahana voló a Estados Unidos y de allí a Guatemala. De nuevo, México le negó la entrada a pie por la frontera sur tras estar detenida cinco horas.
El fotógrafo español Daniel Ochoa, que trabaja para Associated Press y también cubrió la caravana migrante, aseguró que le habían negado la entrada a Tijuana desde San Ysidro el 20 de enero. Estuvo detenido cuatro horas. La fotógrafa Ariana Drehsler describió a NBC7 que le han hecho una inspección secundaria tres veces tratando al entrar en EE UU desde Tijuana. Los agentes le dijeron que había una alerta en su pasaporte, por lo que le volvería a pasar.
El departamento de Aduanas de Estados Unidos, de quien depende la inmigración, contestó a la información con un comunicado en el que no negaba la existencia del informe. “La reciente movilización de caravanas de centroamericanos para llegar a nuestra frontera sur añade nuevos desafíos a una misión que ya es complicada y peligrosa”, dice el comunicado enviado a la cadena de televisión por email. “Sucesos criminales, como el salto de la valla fronteriza en San Diego, que conllevó ataques a agentes y un riesgo para la seguridad pública, son vigilados e investigados por las autoridades de forma rutinaria. Estas actividades pueden resultar en una revisión más a fondo de aquellos que intentan entrar en nuestro país”.
Después de publicar la historia, CBP aclaró que las personas que aparecen en la base de datos estaban presentes durante un suceso violento que se registró en noviembre en Tijuana después de la llegada de la caravana migrante. La agencia fronteriza añadió que la vigilancia a los periodistas era para buscar más información sobre cuál fue el origen de la violencia.
No está claro a qué incidente violento se refiere la respuesta oficial. El 11 de noviembre, un grupo de centroamericanos de la caravana se enfrentó de forma violenta a con residentes de Tijuana que protestaban por su presencia en la ciudad. El día 26, un grupo trató de llegar corriendo hasta la valla fronteriza y algunos llegaron a saltar al otro lado. La policía fronteriza utilizó gases lacrimógenos para reprimir la protesta y las imágenes generaron una fuerte polémica en Estados Unidos.