Justicia Alternativa en Veracruz

Arturo Salgado / Veracruz, Ver. / Lunes 25 de febrero del 2019

El abogado jarocho Carlos Calles Alvarado inauguró la tarde del sábado el primer Centro Privado de Mediación en el Estado de Veracruz, donde pretenden a través del diálogo solucionar problemas entre las partes en cualquier materia, excepto penal y justicia para adolescentes.

Se trata de un mecanismo contemplado dentro del Nuevo Sistema de Justicia Acusatorio, dependiente del Poder Judicial del Estado de Veracruz a través del Centro Estatal de Justicia Alternativa (CEJAV), que vendría también a coadyuvar en la lucha anticorrupción implementada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Tarde pero llegó. Veracruz es la última entidad del país en tenerla. Sin lugar a dudas un paso muy importante en materia de justicia restaurativa.

En México la corrupción es también un cáncer en el aparato judicial; la mayoría de los responsables de procurar e impartir justicia cargan sospechas de torcer la ley para beneficiar a poderosos, influyentes y de todo aquel que pague más.

Entrevistado después de cortar el listón que abre las puertas del primer Centro Privado de Mediación en la entidad, Calles Alvarado explicó que la justicia alternativa viene a terminar con los juicios largos y tediosos desfogando carga de trabajo al órgano jurisdiccional.

Los convenios que se firmen entre las partes en conflicto serán cosa juzgada con sentencias firmes, y si alguno de los firmantes involucrados no cumple, el afectado ya no tendrá que irse a un juicio sino a las vías de apremio.

Destacó que la justicia alternativa ha funcionado en otras entidades. Tan solo en 2015 en el Distrito Federal se atendieron 350 mil casos. Según el INEGI cada juicio le cuesta al estado 35 mil pesos, y son miles las denuncias que se atienden en Veracruz y millones en todo el país, representando mucho el dinero que se gasta en impartir justicia, que se ahorrará con la implementación de este nuevo mecanismo.

El litigante veracruzano criticó el nulo interés de Colegios y Barras de Abogados en el nuevo sistema de justicia alternativa porque piensan que serán desplazados. “Están en un error, al contrario pueden darle a sus clientes solución más pronta y expedita, tal vez cobren menos pero el tiempo de respuesta será más corto que muchas veces es lo que quieren los clientes en sus asuntos y es lo que no hay, los juicios demoran mucho”, señala.

Asegura que son varios los beneficios para los involucrados en una mediación privada:

1.- Es barata y ofrece eficacia y certidumbre jurídica; el tiempo, la firma de un convenio con otra persona, (ejemplo un divorcio), lo puedes hacer por las tardes, sábado o domingo, o en el tiempo que mejor acomode a los participantes; mientras que en un juicio pierdes todo un día en la ratificación.

2.- Existe secrecía, el problema se soluciona con profesionalismo y confidencialidad en un ambiente cómodo, serio, sin necesidad de alargarse la necesidad de justicia de la persona, mientras que si acudes a un juzgado todo mundo se entera.

Carlos Calles Alvarado es el joven abogado que en julio de 2017 ganó un amparo federal que paralizó en el Congreso de Veracruz el proceso selectivo para nombrar Comisionado del Instituto de Acceso a la Información (IVAI), cuya convocatoria impedía su participación por no cumplir el requisito mínimo de 35 años para desempeñar el cargo.

Hoy, metido a la mediación en la justicia alternativa, Calles Alvarado asegura no abandonar la lucha social en defensa de los derechos humanos:

“No, no, no, para nada, jamás abandonaré mis ideales, seguiré siempre pugnando por los derechos humanos, lo que pasó es que se dio la opción de participar en la convocatoria de mediadores privados y gracias a Dios obtuvimos la certificación”.

Puntualizó que la mediación es otra rama, es otra parte de los derechos humanos; la justicia alternativa es un derecho al acceso a los mecanismos alternos tutelados constitucionalmente.

Explicó que la cultura de la paz es aquella en la cual todos queremos solucionar nuestros problemas a través del dialogo: “no podemos dejar de ser partícipes de ser más humanos, más empáticos con nuestros semejantes, no podemos estar tazando nuestras diferencias en sedes jurisdiccionales a través de juicios tediosos y largos, con una serie de herramientas para retardar los procedimientos de manera excesiva”.

“Independientemente a que soy abogado, siempre me estoy actualizando, no quiero parecer en 10 años obsoleto, estoy intentando adelantarme un poco al tiempo, al final con las reformas constitucionales y las diversas leyes generales y federales vienen mecanismo alternos en solución de controversias, estar más preparado es otra herramientas más eficaz”, concluyó.

Lo acompañaron en la inauguración, sus padres Cahím Calles y María del Carmen Alvarado Almazán, su esposa abogada Griselda Santiago Herrera, el diputado local Jorge Moreno Salinas, los ingenieros Alejandro y Víctor Montellano, el periodista Hugo Gallardo, además de abogados litigantes y amigos, entre otras personalidades.

Para los interesados, las oficinas del Primer Centro Privado de Mediación en el Estado, se encuentran en la Calle 4 No. 188, entre Hernán Cortés y Juan Soto, Col 21 de Abril, en el puerto de Veracruz.