Muy Interesante / Ciudad de México / Martes 18 de diciembre del 2018
¿Te has preguntado alguna vez por qué algunas canciones nos parecen instintivamente alegres, y otras, en cambio, nos transmiten pena y tristeza?
El secreto está en la tonalidad en la que están escritas; es decir, en la relación que existe entre los sonidos que hay en la escala en la que está tocada cada canción.
La tonalidad vendría a ser como el sistema operativo de nuestros dispositivos, es decir, es el Windows, Linux o iOS de la música. Así, las canciones alegres son las que están tocadas en tonalidad mayor. En cambio, la tonalidad menor nos produce sentimientos de tristeza y angustia.
Es más: la misma canción, tocada en dos tonalidades diferentes, puede provocar dos sensaciones completamente distintas. Y lo descubrimos escuchando el ‘Happy Birthday’ de parte de Ana Valero, violista.
Como bien describe, la música no son sonidos, sino la relación que existe entre ellos.