El Financiero / Villahermosa, Tabasco / Viernes 14 de diciembre del 2018
La Fiscalía General del Estado de Tabasco (FGE) quedará acéfala a partir de este 15 de diciembre, ante la renuncia de Fernando Valenzuela Pernas, quien ocupó el cargo desde finales de 2012 y se va tres años antes de concluir el periodo para el que fue designado.
El catedrático y doctor en Derecho decidió abandonar su puesto en un contexto negativo en el estado: Villahermosa se ubica entre las cinco ciudades con mayor percepción de inseguridad y de acuerdo al último reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSSP), Tabasco ocupa el primer lugar de robo con violencia en todo el país.
De acuerdo con Observatorio Ciudadano, la entidad también encabeza la lista de robo a transeúnte y es el quinto lugar en robo a negocio y robo a vehículo, el número 12 en robo a casa habitación, el 10 en extorsión y el 13 en violación y el narcomenudeo creció en más de 200 por ciento en octubre pasado, por señalar algunos datos.
A pesar de ello, el funcionario aseguró en un programa radiofónico, donde anunció su salida, que le tocó encabezar la FGE en medio de un panorama “complejo”, pero logró diversos avances para encaminar un cambio radical en su interior, lleno de vicios arraigados.
“En la vida pasamos ciclos, un servidor considera que se terminó el suyo. Ya se realizó la cimentación del Nuevo Sistema de Justicia Penal y hay que darle la oportunidad al nuevo gobierno de que sean ellos quienes continúen con el proceso de crecimiento. En términos muy simples dejamos la fiscalía como si fuera un niño, ya caminando” dijo.
El exdiputado local fue nombrado en diciembre de 2012, siendo aún gobernador Andrés Granier Melo (hoy recluido por presuntamente malversar recursos públicos) en la entonces Procuraduría General del Estado, después fue ratificado por 9 años para la Fiscalía.
Justamente, Valenzuela Pernas se va antes de concluir los procesos que tenía en sus manos para esclarecer el llamado “saqueo” en la administración pasada, y sin dar respuesta de casos como el asesinato del comunicador Juan Carlos Huerta, ocurrido este año.
Según versiones, su renuncia obedece a acuerdos con el gobierno electo de Adán Augusto López Hernández y en su lugar llegaría Jaime Lastra Bastar, integrante del equipo de transición de las nuevas autoridades locales.
Ademá se alistaría para convertirse en rector de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), en donde es profesor investigador.
Corresponderá al Congreso Local nombrar a su sucesor, probablemente en un periodo extraordinario de sesiones en 2019.