Excelsior / Ciudad de México / Martes 14 de agosto del 2018
María de los Ángeles es policía tercero, con siete años de servicio. Actualmente estudia la Licenciatura de Ciencias Policiales y tiene un promedio de excelencia; pero esto no le ayudó cuando denunció el acoso y agresiones del Comisario de la Policía Federal Luis Flores Fierros, ocurridos el 11 de mayo en su oficina, lugar donde la citó para hacerle una oferta de trabajo.
"Me dice que vamos a trabajar muy bien, yo le pregunto ¿de qué forma? él me dice, vas a ser mi asistente, cuando yo llegue me vas a atender”.
"Estoy yo sentada, gira, se pone enfrente de mí, me pone la mano en el hombro, me empieza a apretar y en el momento en que me dice ¿qué tal eres para el sexo oral? baja la mano y me presiona el seno.
"Cuando me toca es cuando yo lo aviento, me levanto e intento salir de su oficina”.
Era viernes y afuera de la oficina únicamente estaban los guardaespaldas del Comisario, quienes la vieron salir llorando. Horas después ella denunció lo sucedido en el área jurídica de la corporación donde, asegura, fue re victimizada y discriminada.
"La titular del área jurídica de fuerzas federales, su nombre es Jaqueline Becerra, le dije que no quería estar bajo su mando porque esta persona me había agredido física y sexualmente; Entonces no me creyó, de forma incrédula me hizo saber que yo estaba mal, que ella lo conocía y que prácticamente lo que le estaba yo diciendo no era verdad”.
El 24 de mayo, María de los Ángeles decide interponer su denuncia ante la Fiscalía para los delitos de Violencia contra las Mujeres de la PGR. También lo hizo ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos, y la Secretaría de la Función Pública.
Buscó además la intervención de la Unidad de Igualdad Sustantiva de la Policía Federal, a cargo de Marisol Ponce Juárez, área dedicada a atender este tipo de casos de violencia sexual, pero tampoco encontró el apoyo que esperaba.
"Ella me dijo que era una persona que sabe de la materia y que no iba a avanzar con mi denuncia. Me dijo que tratara de llevarme la fiesta tranquila, así la palabra ’fiesta tranquila’ y que me diera cuenta que yo soy una policía tercero, y que él es un Comisario en jefe, y que de cierta manera tenía desventaja”.
Como medida cautelar, María de los Ángeles fue asignada para trabajar en esta área, en donde no duro más que unos días porque denuncia que agredida físicamente por Marisol Ponce.
Las lesiones fueron fotografiadas por el médico que la atendió dentro de la misma Policía Federal.
"Yo lo que quiero es limpiar mi dignidad, yo creo que para una mujer es lo más importante que uno tiene. No puedes dejar que cualquier persona venga y te pisotee porque eres policía tercero, porque eres mujer ‘no’.