Redacción PV / Ciudad de México / Jueves 8 de febrero del 2018
Debido a una serie de errores tanto de las autoridades mexicanas como españolas, el presunto prestanombres de Javier Duarte, Javier Nava Soria, quedó en libertad.
Según las autoridades españolas, no podían entregar a Nava Soria, ya que faltaba un relato de los hechos que delimitara los presuntos delitos por los que era señalado, por lo que se concluyó que no se cumplían los requisitos legales para su entrega.
Sin embargo, autoridades mexicanas aseguraron que mandaron toda la documentación exrtradicional necesaria para el Tratado Bilateral.
A decir de las autoridades mexicanas, en España omitieron una nota verbal, documento clave en el caso; sin embargo, las autoridades españolas aseguran que dicho documento no tiene validez jurídica, por lo que no se presentó.
Tras estos hechos, la Procuraduría General de la República (PGR), culpó al Ministerio de Justicia español de no entregar la documentación a los jueces de audiencia, al tiempo que los acusó de omisión.
Asimismo, la PGR informó que al revisar la documentación que llegó a los juzgados españoles descubrieron que la nota verbal había desaparecido, en la cual se señalaban los delitos que presuntamente había cometido Javier Nava.
Por lo que la PGR aseguró que la extradición se negó por un “error de forma no atribuible al gobierno de México”.
Por su parte, el Ministerio español negó que la nota verbal se haya extraviado, y aclaró “la citada nota es el canal de comunicación diplomático mediante el cual de vehicula la documentación extradicional, pero no forma parte de dicha documentación conforme a las exigencias de los tratados internacionales”.
Debido a dichas normas, el Ministerio no remitió a la audiencia española la nota verbal, al considerarla no esencial para el procedimiento.