Excelsior / Moscú, Rusia / Viernes 29 de diciembre del 2017
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, se mostró inflexible para combatir a quienes realicen atentados terroristas en su país, pues ayer, durante una conferencia para condecorar a las Fuerzas Armadas que sirvieron en Siria, ordenó a las fuerzas de seguridad “liquidar” a los autores de los atentados que pongan en peligro a la población rusa.
Luego de considerar la explosión en un supermercado de San Petersburgo como atentado, el mandatario anunció que ordenó a los servicios de seguridad del país (FSB) “liquidar a los bandidos sobre el terreno (cuando sean detenidos en Rusia) en caso de amenaza a la vida o la salud”.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov precisó que el mandato es para “quienes se preparen para cometer atentados en nuestro país”.
Las investigaciones en torno al caso continúan y las imágenes que tomaron las cámaras de seguridad ya fueron publicadas por el portal Fotanka.ru. En ellas se puede apreciar como un individuo entra con una mochila visiblemente pesada, la coloca en una zona de almacenaje para las bolsas de los clientes y sale del supermercado. El sospechoso vestía una chamarra verde con capucha.
A través de un comunicado, el Comité Nacional Antiterrorista (NAK) indicó que está coordinando la investigación en la que “un artefacto de fabricación casera colocado en un casillero de la consigna estalló” en el supermercado situado en la avenida Kondratiev.
El comité explicó que la carga era “equivalente a 200 gramos de dinamita”. Aún buscan a las personas relacionadas con este delito.
Sin descartar alguna pista, Putin indicó que se había abierto una investigación por “intento de homicidio”, pues en el recuento más reciente había al menos 13 personas heridas y seis seguían hospitalizadas.
A mediados de este mes, los servicios de seguridad rusos anunciaron que, gracias a información que la CIA les otorgó, habían desmantelado una célula del Estado Islámico (EI) que se disponía a perpetrar un atentado el 16 de diciembre en la catedral de Nuestra Señora de Kazán, una atracción turística popular. Se detuvieron siete sospechosos vinculados con el EI, de acuerdo con el Servicio Federal de Seguridad.
El ejército moderno ruso
Durante la ceremonia de condecoración a los elementos del ejército que participaron en la ocupación Siria, Vladimir Putin afirmó que después de poco más de dos años de operaciones en Siria el mundo ha visto que Rusia tiene un Ejército moderno.
“Esto lo ha visto todo el mundo y, lo que es más importante, nuestro pueblo. La gente ha sentido que está defendida, que está defendida de manera fiable y esto es mérito de ustedes”, dijo Putin.
Señaló que los emplazamientos del ejército que quedaron en ese país están en el aeródromo Jmeimim y el puerto de Tartus, importantes factores de defensa de los intereses nacionales y lugares que “garantizan la seguridad de Rusia en una de las direcciones estratégicas clave”.
Temen por la llegada de yihadistas
El atentado en el supermercado en San Petersburgo, es el segundo que hay en la segunda ciudad más importante de Rusia.
Tan sólo este año, se ccontabilizan cinco ataques importantes, siendo el peor el del 3 de abril, en el que una persona se hizo estallar en el metro de San Petersburgo; 15 personas perdieron la vida y decenas resultaron heridas.
En reiteradas ocasiones, el Estado Islámico y la organización siria Al Queda han amenazado al gobierno ruso desde su intervención militar en Siria, que comenzó el 30 de septiembre de 2015.
Con anterioridad, el presidente Vladimir Putin se ha referido a la operación militar rusa en Siria como un golpe preventivo contra el terrorismo en ese país, argumentando que de no hacerlo la amenaza sería mayor.
“¿Qué habría pasado si de esos miles (de terroristas) a los que me he referido, cientos de ellos hubieran vuelto a nosotros, entrenados y armados”, dijo en declaraciones a agencias rusas.
Luego de que Putin ordenara la retirada de parcial de Siria, los servicios de seguridad afirmaron que temían la llegada de yihadistas de Siria e Irak, ahora que el EI había perdido sus territorios.
Alexander Bortnikov, director de los servicios de seguridad de Rusia (FSB) indicó que cerca de cuatro mil 400 ciudadanos rusos se fueron al extranjero “a combatir junto a los terroristas”.
La mayoría de estos ciudadanos son procedentes de las inestables repúblicas musulmanas del Cáucaso.
A ellos se añaden miles de combatientes procedentes de Asia central, que representan una importante diáspora en Rusia.