Excelsior / Ciudad de México / Sabado 16 de diciembre del 2017
Sólo 11 minutos tardó el recorrido de la exdirigente magisterial Elba Esther Gordillo Morales, del hospital donde convalecía, en las Lomas de Chapultepec, a su departamento de la calle de Galileo, en Polanco, donde cumplirá prisión domiciliaria.
La ambulancia de Urgencias Básicas de la Procuraduría General de la República (PGR) salió de la clínica particular a las 2:29 horas, la madrugada de este sábado, para llegar al condominio en Galileo a las 2:38 horas.
Personal de seguridad, paramédicos de la ambulancia y representantes de medios de comunicación se remolinaron en torno a la camilla de la ex dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), unos para protegerla y otros para conocer el estado de la profesora.
Un leve “bien gracias” se alcanzó a escuchar a la pregunta de “¿cómo se siente”, desde una camilla en donde una ligera sábana blanca, para el frío de la madrugada, cubría su cuerpo.
Entre empellones bajaron la camilla y se abrieron paso hasta la puerta de acceso al condominio de 12 pisos, al que regresa Gordillo Morales tras cuatro años y diez meses de haber sido detenida en el Aeropuerto Internacional de Toluca, en el Estado de México.
En este departamento, el penthouse, la ex dirigente magisterial seguirá su proceso penal por los delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero, por mil 978 millones de pesos, luego de ser detenida el 26 de febrero de 2013.
Las investigaciones realizadas por la PGR, entonces a cargo de Jesús Murillo Karam, establecieron que desde las cuentas del SNTE y personales de Gordillo Morales se realizaban transferencias millonarias, para gastos suntuosos de la profesora.
Gordillo Morales obtuvo un amparo por parte de la magistrada federal Isabel Porras Odriozola, del Tercer Tribunal Unitario Penal, y que fue ratificado por el titular del Primer Tribunal Unitario, Miguel Ángel Aguilar López, luego de que la PGR se desistió de la apelación correspondiente.
La profesora propuso dos inmuebles para seguir su proceso bajo a figura de arraigo domiciliario, uno en el Club de Golf Bosques de Santa Fe y el de Polanco.
Durante estos cuatro años y diez meses, Gordillo Morales, de 72 años de edad, estuvo detenida en el Reclusorio Femenil Oriente, en la Torre Médica del penal femenil de Tepepan, en Xochimilco; en el Hospital de Urgencias de Xoco, en una clínica la colonia Roma y en el hospital privado de Lomas de Chapultepec.