Sinembargo.mx / Ciudad de México / Sabado 9 de diciembre del 2017
Ricardo Anaya Cortés presentó este sábado su renuncia a la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN), para ir por la candidatura a la Presidencia de la República en 2018 como representante de la coalición denominada “Por México al Frente”.
“He tomado la decisión de separarme de la dirigencia nacional del Partido. Pongo a su consideración mi licencia.
El día de mañana buscaré ser candidato a la Presidencia de la República”, dijo el panista en la sesión extraordinaria de la Comisión Permanente del blanquiazul.
El aspirante presidencial será sustituido por el secretario general, el sonorense Damián Zepeda.
Apenas ayer por la noche, el PAN, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Movimiento Ciudadano (MC) registraron ante el Instituto Nacional Electoral (INE) el convenio de dicha coalición con la que esos tres partidos competirán en los comicios federales del 1 de julio de 2018.
Y este sábado más temprano, Miguel Ángel Mancera Espinosa, el principal rival de Anaya Cortés para representar a ese frente, no sólo se descartó para ser candidato por esa alianza, sino que rechazó ser el coordinador de la campaña presidencial del panista, por lo que seguirá encabezando el Gobierno de la Ciudad de México.
La carrera de Anaya, de 38 años de edad, se ha definido entre constantes contradicciones, señalamientos e inconsistencias. Casi todos los políticos de los que se ha servido lo consideran traidor. Se le reclama porque dice algo, y luego mueve las piezas para su propio beneficio.
También tiene señalamientos serios sobre posible desvío de recursos tanto del partido como de la Cámara de Diputados para apuntalar sus aspiraciones personales.
El mayor de sus muchos pleitos públicos de los últimos años es el que protagoniza con Margarita Zavala Gómez del Campo, con quien comparte una misma debilidad: ninguno de los dos han ganado, nunca, un puesto de elección popular.
El pasado 6 de octubre, Margarita Zavala Gómez dejó Acción Nacional, partido en el que militó durante 33 años y que llevó a su esposo, Felipe Calderón Hinojosa, a la Presidencia de México.
Renunció para irse a competir como candidata independiente porque en el PAN, acusó, no había consenso.
La esposa del ex mandatario estuvo dos años enfrentada a la dirigencia nacional de su ahora ex partido; estuvo en constante tensión con Ricardo Anaya Cortés, a quien alguna vez en un evento público le dijo que él era causante de una “gran división” interna. Le reclamó, lo llamó antidemocrático. Le pidió que renunciara a la presidencia partidista.