Excelsior / Washington, EU / Viernes 8 de diciembre del 2017
El congresista estadounidense Trent Franks (republicano), investigado por el Comité de Ética de la Cámara Baja por sugerir a dos de sus trabajadoras que hiciesen de vientre de alquiler para él, anunció hoy su próxima dimisión.
"Asumo la responsabilidad total y personal por las formas en las que abordé un tema que, sin que yo lo supiera hasta hace muy poco, generó incomodidad en algunas personas", dijo Franks, uno de los congresistas más conservadores de la cámara, en un comunicado.
"Quiero dejar una cosa completamente clara. Absolutamente nunca he intimidado físicamente, coaccionado, o hecho, o intentado hacer, ningún tipo de contacto sexual con nadie de mi personal en el Congreso", añadió.
Franks hizo esta aclaración "dada la naturaleza de numerosas acusaciones e informaciones (de acoso sexual) en todo Estados Unidos. en las últimas semanas".
Congresista por Arizona desde 2003, Franks confesó en su comunicado que su esposa y él han enfrentado problemas de fertilidad y que han sufrido tres abortos, por lo que ya recurrieron a un vientre de alquiler para concebir a sus dos hijos, que son gemelos y nacieron en 2008.
Después de eso, "seguimos con el deseo de tener al menos un hijo más (...). Debido a mi familiaridad y experiencia con el proceso de subrogación, claramente me volví insensible en cómo la conversación de un tema tan personal podría afectar a otros", afirmó.
Antes del anuncio de su renuncia, que hará efectiva el próximo 31 de enero, el Comité de Ética de la Cámara de Representantes anunció la apertura de una investigación en su contra por "participar en una conducta que constituye acoso sexual".
Precisamente hoy, también anunció su dimisión el carismático senador demócrata Al Franken, acusado de besar y tocar a por lo menos ocho mujeres sin su consentimiento.
A principios de semana, otro congresista demócrata, John Conyers, anunció que no se presentará a la reelección en los comicios de 2018 tras más de 50 años en el Legislativo por otra serie de acusaciones de abuso sexual.
Con las dimisiones de Franks, Franken y Conyers, la oleada de acusaciones de abuso sexual que hace meses afloran en Estados Unidos en el marco del movimiento "Me too" tiene sus primeros efectos en el Congreso después de haber convulsionar al mundo de Hollywood.