Mediotiempo / Los Ángeles , California / Jueves 26 de octubre del 2017
Dicen que el que ríe al último ríe mejor y los Astros ejemplificaron a la perfección esta frase. Un jonrón de Marwin González en la novena entrada, cuando los Dodgers se encontraban una carrera arriba en el marcador, mandó el segundo juego de la Serie Mundial a extra innings donde Houston derrotó 7-6 a Los Ángeles.
El cuadro angelino le había dado la vuelta a una pizarra que les era adversa desde la segunda entrada, pero tras el bambinazo del jardinero izquierdo, José Altuve y Carlos Correa se encendieron y sumaron otro par de vuelacercas para devolverle la ventaja a la novena visitante ya en el rollo 10, y a la postre la victoria.
Fue un un festival de cuadrangulares en el partido que se resolvió en 11 innings, con ocho jonrones combinadamente (cuatro para cada equipo) que se estableció un récord para un Clásico de Otoño y que se resolvió cuando George Springer sacudió un jonrón de dos carreras en el 11mo inning.
Justin Verlander, quien no ha perdido desde su llegada a Houston, tuvo una destacada actuación como abridor y solo había permitido dos imparables hasta que en la quinta entrada permitió un jonrón, por lo que la victoria fue para Christopher Deveski.
Con este resultado, los Astros festejaron su primer triunfo en un juego de la Serie Mundial en su historia de 56 años y la Serie Mundial se igualó 1-1 por lo que ahora se trasladará al Minute Maid Park de Houston, donde los texanos buscarán tomar ventaja de su localía.