El Intransigente / Hong Kong / Domingo 17 de septiembre del 2017
Una insólita forma de morir: aplastado por un ataúd en el interior de una “Casa Embrujada”. Ocurrió en un parque de diversiones de Hong Kong y el desdichado fue un joven de 21 años de edad de apellido Cheung.
El hecho ocurrió a los cinco minutos de iniciado el recorrido en una atracción denominada "Enterrado Vivo", y que se puso en funcionamiento a raíz del lanzamiento del festival de Halloween de Ocean Park, el establecimiento de su tipo más grande de la región.
Según informaron las autoridades del parque, Cheung ingresó sin permiso a un sector vedado al público y falleció luego de que un ataúd le callera sobre la cabeza. Además dijeron sentir una "profunda pena" por el hecho.
Las atracción, que fue suspendida por el gobierno local, prometía "la experiencia de ser enterrado vivo solo, antes de luchar contra su salida de su oscura y misteriosa tumba". El recorrido se realizaba en un ataúd reconvertido en vehículo, por "un laberinto rocoso lleno de espantosos ghouls (seres mitológicos)".
Si bien la policía abrió una investigación por el hecho, se estima que el Parque evitará todo tipo de consecuencias, ya que las autoridades presumen que el joven salió del recorrido autorizado por la atracción.