Excelsior / Seúl / Miercoles 6 de septiembre del 2017
Los gobernantes de Rusia y Corea del Sur condenaron el miércoles el último ensayo nuclear norcoreano, aunque defendieron posiciones muy distintas sobre la idea de aumentar las sanciones a Pyongyang tras una reunión en el puerto ruso de Vladivostok.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, pidió que se entablen conversaciones con Corea del Norte y dijo que las sanciones no son una solución al desarrollo nuclear y de misiles norcoreanos, en declaraciones tras reunirse con el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in.
Moon había pedido el apoyo de Moscú para endurecer las sanciones contra Corea del Norte, que el domingo hizo su sexta prueba nuclear, en la que afirmó haber detonado un arma termonuclear diseñada para misiles capaces de alcanzar el territorio continental estadunidense.
"No debemos ceder a las emociones y arrinconar a Pyongyang”, dijo Putin en una rueda de prensa tras el encuentro, celebrado en un aparte de una conferencia sobre desarrollo económico del extremo oriental de Rusia.
"Como nunca antes, todo el mundo debe mostrar moderación y evitar pasos que lleven a la escalada y a tensiones”, añadió.
El presidente ruso afirmó que la hoja de ruta elaborada por Moscú y China ayudará a resolver la crisis y pidió a los vecinos de la nación más hermética del mundo que respalden un plan que “ofrece una autentica vía para aliviar las tenciones y una solución paso a paso”.
La embajadora de Estados Unidos ante Naciones Unidas, Nikki Haley, rechazó esta propuesta apuntando que Washington “ya no va a hablar más sobre Corea del Norte”.
Por su parte, Moon dijo que estaba de acuerdo con Putin en que es crucial reducir la tensión regional y “resolver rápido” los desafíos de seguridad que plantean los programas nuclear y de misiles de Corea del Norte.
Antes de su reunión, Moon dijo que la situación podría descontrolarse si no se detienen las pruebas norcoreanas de misiles y armas nucleares.
Moon instó a Moscú a respaldar sanciones más duras como el corte de los suministros de petróleo, pero Putin expresó su preocupación de que medidas de esa clase pudieran perjudicar a los norcoreanos de a pie, indicó Yoon Young-chan, secretario de prensa de Moon.
El Ministerio surcoreano de Defensa dijo el miércoles que el Ejército estadounidense empezaría a colocar el jueves más lanzadores en un polémico sistema antimisiles estadunidense de última tecnología que se está desplegando en Corea del Sur para responder a las amenazas norcoreanas.
El despliegue del sistema antimisiles ha indignado no sólo a Pyongyang, sino también a China y Rusia, que ven los potentes radares del sistema como una amenaza de seguridad.