Mediotiempo / Monterrey / Jueves 11 de mayo del 2017
¡Por fin! El sueño de todos los aficionados de Tigres de echar a Rayados en una Liguilla está cerca de cumplirse; los felinos golearon 4-1 en la ida de los cuartos de final del Clausura 2017 y parece que la mesa está puesta para que los de Tuca eliminen por primera vez a su archirrival.
Monterrey intentó revivir en tiempo de compensación (91’) con un gol de José María Basanta que se debió a la mala salida de Nahuel Guzmán, pero el gusto no les duró nada, ya que de inmediato llegó Jesús Dueñas al 92’ para darle a Tigres el respiro perfecto.
Desde los primeros minutos de acción, Tigres fue quien tomó el control del partido, no solo con la posesión del balón, sino con llegadas de verdadero peligro; aun así, Dorlan Pabón al 10’ metió susto con un disparo que pasó besando el travesaño.
La defensa de Rayados fue un desastre, destacándose negativamente César Montes, a quien en el clásico de liga se le enalteció por anular a André-Pierre Gignac, pero esta vez le pintaron la cara al Cachorro.
Fue al minuto 20 que apareció Gignac, el francés que había estado desaparecido en los clásicos anteriores; Dueñas disparó desde la derecha, Hugo González rechazó hacia al centro y el dorsal 10 felino remató picado para vencer al arquero.
Tigres seguía con hambre y al 25’ el Volcán de nuevo estalló, pero el gol de Juninho fue anulado por una clara posición adelantada; poco después, Pabón nuevamente puso un susto disparando muy cerca del arco y al 35’, Rogelio Funes Mori tuvo la más clara de su equipo, pero remató muy por encima.
El último minuto del primer tiempo, un centro de Ismael Sosa se le escapó a Montes y Jesús Dueñas liquidó para el 2-0.
Al minuto 59’, Mohamed buscó generar más en ataque con la entrada de Edwin Cardona, pero al frente tanto Dorlan como el Mellizo estuvieron erráticos, y los goles que no hagas, te los harán.
Al 69’, Sosa centró por izquierda a Gignac, quien de cabeza empujó el 3-0 para Tigres. Por si eso fuera poco para la visita, Aldo de Nigris se fue expulsado tras apenas cinco minutos en la cancha.
El tiempo de compensación tenía reservado más de un sobresalto para los presentes. Primero fue el error de Nahuel que abrió la puerta a un remate de Basanta que acortó distancias para el gusto de los muy pocos fanáticos albiazules en el Volcán, pero todo se les fue al traste un minuto después con Dueñas y un hermoso remate al ángulo para el 4-1 definitivo.
Tigres deberá meterse al BBVA el próximo sábado y preservar la ventaja lograda esta noche, que obliga a Rayados a ganar por tres goles con las opciones de 3-0 y 4-1; si los felinos marcan dos o más en casa ajena, los albiazules se verán forzados a ganar por diferencia de cuatro.