Mediotiempo / Montevideo, Uruguay / Lunes 24 de abril del 2017
Noticia escalofriante la ocurrida este fin de semana en Uruguay, en donde un entrenador de futbol infantil asesinó a uno de sus jugadores de apenas 10 años de edad, según informes de la Policía que citan al ministerio del Interior.
El infante asesinado es Felipe Romero, hijo del exfutbolista profesional Luis Romero, cuyo cuerpo fue encontrado junto al de su entrenador Fernando Sierra a unos 150 kilómetros al noreste de Montevideo, capital de Uruguay.
Lamentablemente, el informe forense realizado tras la muerte confirmó que el niño sufrió abuso sexual y fue muerto por un disparo en la cabeza, al igual que el entrenador, quien se suicidó momentos después de matar al infante.
Según relató la madre del menor, Alexandra Pérez, que trabaja en la policía, Felipe era el niño que Sierra "siempre quiso tener como hijo", según le había dicho el entrenador a la madre, quien confiaba en él y al que su hijo veía con frecuencia desde hacía dos años.
"Y a su vez Felipe siempre me manifestó la necesidad de un padre. Yo soy madre soltera, el padre está ausente siempre, y se complementaron", relató.
El padre biológico del menor es un conocido exfutbolista, Luis Romero, que jugó tanto en Peñarol como Nacional y fue campeón uruguayo.