Excelsior / Buenos Aires / Lunes 17 de abril del 2017
Emanuel Balbo, el hincha de Belgrano golpeado por varios hombres y arrojado desde las gradas durante un partido disputado este sábado, falleció hoy a los 22 años en el Hospital de Urgencias de la central provincia argentina de Córdoba.
Raúl Balbo, padre de la víctima, confirmó este lunes la muerte en un breve diálogo con Radio La Red.
"El Club Atlético Belgrano lamenta profundamente la muerte de Emanuel Balbo y, como institución organizadora del evento en el que se sucedieron los hechos, ratifica su predisposición con la causa en el ámbito correspondiente: la Justicia", manifestó el equipo a través de un comunicado.
Por su parte, la fiscal del caso, Liliana Sánchez, confirmó este lunes, en declaraciones a Radio Mitre que ya hay cuatro detenidos -uno de ellos menor de edad- por "homicidio agravado" y reveló que, sin embargo, el "instigador" del suceso continúa prófugo.
El padre de la víctima, Raúl Balbo, explicó este fin de semana que durante el clásico cordobés ante Talleres, Emanuel se encontró en la tribuna del Estadio Mario Alberto Kempes con Oscar Gómez, acusado de atropellar y matar hace cuatro años a otro de sus hijos, que entonces tenía 14 años.
"En vez de él (Gómez) defenderse solo, incitó a la violencia con todos los amigos que tenía ahí agrediendo a mi hijo. Empezaron a pegarle y hacerle lo que le hicieron. Gómez llamó a todos los amigos y dijo: 'Tírenlo a este que es hincha de Talleres'. Lo corrieron por la tribuna hasta que lo tiraron", sostuvo en una entrevista con Cadena 3.
En imágenes difundidas por el canal TyC Sports se ve como una veintena de hinchas de Belgrano golpean a Balbo, quien en realidad también es simpatizante del mismo equipo, y lo arrojan desde la tribuna a una de las escaleras de acceso, causando una caída de unos tres metros de altura.
El joven ingresó al Hospital de Urgencias de Córdoba en "estado crítico" producto de un "trauma de cráneo grave", según detalló este fin de semana el director del hospital, Maximiliano Tittarelli.
La fiscal confirmó que se investiga la hipótesis sostenida por el padre y calificó lo ocurrido como un "salvajismo inexplicable" que ha conmocionado a la opinión pública.
Asimismo, confirmó que las penas para los acusados serían de entre 10 y 32 años de cárcel.