Mediotiempo / México / Martes 10 de enero del 2017
La FIFA adoptó este martes "por unanimidad" el paso a 48 equipos desde la Copa del Mundo de 2026, con un formato de 16 grupos de tres equipos, anunció la instancia en Twitter.
El Consejo de la FIFA, órgano de gobierno del futbol mundial, adoptó así la propuesta defendida por el presidente Gianni Infantino, para quien este cambio incrementará el interés deportivo de la competición y los ingresos financieros.
"El Consejo de la FIFA decidió por unanimidad el paso a 48 equipos desde 2026, con 16 grupos de 3", anunció la FIFA en un corto mensaje en su cuenta Twitter, precisando que los detalles serán ofrecidos al término de la reunión del Consejo.
El nuevo formato de competición de 48 equipos ha sido elaborado de tal manera que no hay reducción en el número total de días de descanso y un máximo garantizado de siete partidos para los equipos que llegan a la final, mientras que la actual duración de 32 días seguirá de esa manera, a fin de no aumentar el tiempo que los clubes tienen para liberar a sus jugadores, explicó.
Ninguna precisión fue ofrecida sobre la cuestión crucial de la repartición de las plazas suplementarias entre cada confederación, pero según una fuente próxima a la FIFA, Europa pasaría a 16 representantes (frente a 13 en la actualidad) y África a 9 (frente a 5 en este momento).
El Mundial, nacido en 1930 con 13 equipos, pasó a 24 en 1982 y a 32 en 1998, por lo que continúa creciendo, imitando el modelo de la Eurocopa, que pasó a 24 en la última edición en Francia.
Según Infantino, que sucedió en febrero pasado a Sepp Blatter, este paso a 48 equipos permitirá aumentar el interés deportivo de uno de los espectáculos más populares del mundo, permitiendo a más países, y no solo a las grandes potencias del fútbol, tener la esperanza de clasificarse.
Islandia y Gales lograron clasificarse e incluso hacer una buena campaña en la última Eurocopa disputada en Francia, cuando se pasó a 24 equipos, por voluntad de Michel Platini, expresidente de la UEFA, y del propio Infantino, entonces su secretario general.
Infantino tuvo que hacer frente principalmente a las reticencias de los grandes clubes europeos, que estiman que el calendario ya está muy cargado.