Manuel Carvallo / / Jueves 1 de diciembre del 2016
Alejandro Jaimes, integrante de la defensa jurídica de exgobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, advierte que su cliente, no se va a entregar, ya que no existen garantías para un juicio justo.
"Mi cliente no se va a entregar a las autoridades como lo hizo Guillermo Padrés, porque no existen condiciones ni la autonomía de las autoridades para garantizarle un juicio justo", dijo.
Además, aseguró que la PGR carece de pruebas contra Duarte de Ochoa y que las que se conocen son laxas, tratando de acusar una persecución política.
Acusó que hay "chapuzas" por parte de la PGR. Ya que por un lado hay una recompensa de 15 millones de pesos por información que permita capturar a Javier Duarte y por otra, la institución niega ante el Juzgado de Amparo que exista orden de aprehensión contra el exmandatario.
Reprochó, que la impartición de justicia en el país es selectiva, insistiendo en que se trata de una persecución política.
El abogado explicó, que las autoridades federales, más que considerarlo un probable responsable, han convertido a su cliente en un "villano".
Sin embargo, agregó que, cuando le reclaman a la Procuraduría General de la República mediante amparos, presentar información de las acusaciones o los cateos, la dependencia federal niega los actos.
"Eso es lo sorprendente: nos están negando el acto reclamado. Dicen que no existe orden de captura ni de investigación cuando pública y notoriamente por todos los medios se ha demostrado que el propio señor procurador está ofreciendo una recompensa por la detención, localización, captura o aprehensión".
Jaimes afirmó, que las acusaciones contra su cliente están "confeccionadas" por la PGR como si fueran "trajes a la medida".
Sin embargo, responsabilizan al exgobernador veracruzano por haber adquirido múltiples propiedades con dinero de origen ilegal, pero considera que esas imputaciones son "laxas" y sin pruebas, salvo un dicho aislado como el de un testigo colaborador.