Redacción PV / / Jueves 27 de octubre del 2016
Javier Duarte de Ochoa habría creado, a través de hombres pantalla, una sociedad financiera de objeto múltiple (Sofom), a la cual le transfirió 300 millones de pesos del erario veracruzano que posteriormente se usaron para comprar gasolineras y pagar espacios en un periódico capitalino.
La Procuraduría General de la República investiga, según testimonios de Alfonso Ortega López, abogado fiscalista que operaba como prestanombres del hoy prófugo de la justicia federal, quien declaró haber sido la persona que participó en el acta constitutiva de Manjafin, empresa que dijo que manejaba Salomón Mansur Cohen.
Según el periódico Reforma, Alfonso Ortega López dijo que esta Sofom trianguló depósitos de 70 millones de pesos a un periódico de la Ciudad de México, entre 2011 y 2012.
La empresa, según dijo, nació con tres accionistas: Álvaro Larrondo García, Rafael Gerardo Rosas Bocardo y Salomón Mansur Cohen, siendo este último representante legal y familiar de Moisés Mansur Cysneiros, supuesto prestanombres de Duarte, según Ortega.
De acuerdo con información pública del Instituto Mexicano de Propiedad Industrial, Mansur Cohen efectivamente ha fungido como apoderado y el registro de marca de Manjafin fue solicitado el 2 de febrero de 2012 y concedido el 6 de julio del mismo año.
Su vigencia como marca nominal dedicada al giro de seguros, operaciones financieras y monetarias, además de negocios inmobiliarios, expira en febrero de 2022.
La Sofom fue registrada con domicilio en Calle 5 de Febrero 55, Colonia Centro, pero contaba con oficinas que estaban en Calle Mario Pani 750, en Santa Fe. Además, Mansur Cohen tenía registrado otra dirección en Bosque Duraznos 75, despacho 105, Colonia Bosques de las Lomas.
Ortega dice que originalmente fue nombrado tesorero de la Sofom, aunque desconocía el funcionamiento de una entidad financiera de esta naturaleza, lo que determinó que no tuviera mayor injerencia en la empresa y no conociera lo que se hacía.
Los participantes luego se dieron cuenta que había sido un "error" haber creado este corporativo financiero, sobre todo por las regulaciones en la materia, lo que obligó a que dejaran de ser una Sofom. El cambio jurídico al parecer ocurrió el 10 de junio de 2014.
El abogado fiscalista señala que alrededor de 300 millones de pesos ingresaron a Manjafin, de los cuales 70 se destinaron a unas empresas que, a su vez lo transfirieron a un diario capitalino en 2011 y 2012.
También habla de una cantidad millonaria, sin precisar el monto, que esta Sofom depositó a una empresa aparentemente de nombre Xixa, que a su vez trianguló los recursos para la compra de unas gasolineras del Grupo Hidrosina.
Durante su testimonio ante la PGR, el abogado fiscalista dijo que habló con el apoderado de Manjafin y que lo vio temeroso y consiente, por el tipo de operaciones que llevaron a cabo.
PV/MVV