Veracruz, Ver.

     
De un plumazo


Persecución

Lunes 20 de Febrero del 2017

El pleito casado que trae el clan Yunes y Fidel Kuri Grajales, propietario de los Tiburones Rojos, podría derivar en una tragedia.
El orizabeño dice que han orquestado una persecución en su contra, retirándole la vigilancia al interior y exterior del estadio Luis de la Fuente “El Pirata”, le enviaron un pequeño ejército de inspectores para contabilizar el aforo en el último partido y sólo autorizaron a 60 marinos que no pudieron con la turba violenta, el viernes pasado.
Dijo que aunque paga sus impuestos religiosamente, que se arregló con el alcalde Miguel Yunes Márquez, no cesa el hostigamiento en contra del Club Veracruz.
Cuidado. Si las cosas siguen así, se descuida la integridad física de la afición para el próximo partido.
Y la prevención del delito y de conductas violentas, es tarea del gobierno estatal.
Los veracruzanos estamos hartos de la violencia, venga de donde venga.