Esperanza muerta

Martes 24 de Octubre del 2017

Otra vez la inseguridad.
Nuestra moneda de cambio, la imagen que lanzamos al exterior, es una violencia asfixiante.
En la charla familiar, en reuniones de café, el fantasma de la inseguridad se apodera de nuestra vida cotidiana, pero también de la colectividad, de la sociedad mexicana.
La coincidencia es unánime: queremos, rezamos, oramos porque se acabe este sexenio de pesadilla.
Que se largue Enrique Peña Nieto, arquetipo de la corrupción que ahoga a los millones de mexicanos que ven la esperanza ida.
Las cifras de la maldad siempre van al alza.
El Semáforo Delictivo Nacional publica una estadística escalofriante: este año cerrará con más de 24 mil homicidios y 18 mil ejecuciones.
Será el año más violento en la historia moderna de este país, sangrante por la colusión de gobernantes y delincuentes, fundidos en abrazo cómplice.
México se encuentra inmóvil ante el gran fracaso de la estrategia de seguridad, remacha Santiago Roel, director de esta ONG.
¿Qué hacemos? ¿Hacia dónde nos movemos? ¿Habrá una esperanza de cambio? Son preguntas que resuenan en cien millones de cabezas en este nuestro México moribundo.
La respuesta está en nosotros mismos.