Veracruz, Ver.

     
De un plumazo


CRIVER

Viernes 16 de Junio del 2017

El asunto del Centro de Rehabilitación Infantil de Veracruz, es apenas la punta de un iceberg de la apatía oficial hacia una política oficial que no sea electorera.
Los pobres son despreciables, su único valor es el voto que producen; una vez ordeñada la boleta electoral, son aventados a sus cinturones de miseria, a las colonias precaristas, ya despojados de su utilidad partidista.
6 mil niños dependen del Criver. Un millón 300 mil pesos requieren como mínimo necesario para operar.
La cantaleta, es el mismo discurso repetido desde hace seis meses: no hay dinero, se lo robaron los ladrones fugados o encarcelados.
Hasta que la presión social fue tal que reventó en las tendencias de la red social.
Entonces, obligado por la circunstancia, no sin remachar por enésima ocasión la austeridad provocada por el latrocinio, aparece el gobernante como salvador del colapso.
El Criver seguirá, gracias a la presión social, no por magnánimo gesto del gobernante.
Repetimos, la política social ausente, será río erosionador de proyecciones políticas futuristas.