Veracruz, Ver.

     
ESTATAL


Bajos sueldos y garantías laborales nulas, calvario de periodistas



Sergio Aguilar / Boca del Río, Ver. / Miercoles 7 de junio del 2017

La libertad de expresión en México sigue amenazada. Con una lista negra de comunicadores muertos y desaparecidos, se conmemora el día, aunque a decir de los periodistas no existen las garantías para el pleno ejercicio y “hay poco qué celebrar” este 7 de junio.

A nivel nacional en lo que va de este año se registran siete comunicadores asesinados. Pero la protección de la profesión no es el único pendiente que se viene arrastrando al paso de los años. La comunidad periodística padece también de la precariedad laboral, es decir, desempeñan su tarea sin las mínimas garantías y prestaciones que confiere la ley a cualquier trabajador.

Ángeles Montes, reportera en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, consideró que el gremio sigue teniendo malos sueldos y falta de prestaciones.

Javier Madrigal, quien labora para Radio Televisión de Veracruz (RTV), expresó que el Día de la Libertad de Expresión es un buen momento para exigir seguridad para ejercer el periodismo, además de poder percibir mejores salarios.

Yahir Ceballos, foto reportero, señaló que el 7 de junio no hay nada que festejar, ya que el gremio periodístico trabaja bajo ínfimas condiciones, sin equipo, sin viáticos, sin buenos sueldos.

Andrés Salomón, quien ha laborado como corresponsal para medios de comunicación nacionales, manifestó que las garantías individuales de los reporteros no son respetadas por los dueños de las empresas y en ocasiones ni por los mismos funcionarios públicos.

Los gobernadores y el Gobierno de la República recientemente han firmado un acuerdo para formalizar y unificar el Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas.
La conmemoración del día fue establecida en 1951 por el entonces presidente Miguel Alemán Valdés; más tarde el presidente Luis Echeverría incluye la entrega del Premio Nacional de Periodismo. Sin embargo, a nivel nacional desde hace mucho pero particularmente en la actual coyuntura que vive el oficio, el llamado de los que ejercen este derecho es a resignificarlo y alejarlo del oficialismo.