Veracruz, Ver.

     
CIENCIA Y TECNOLOGíA


Encuentran un compuesto anticonceptivo en el aloe vera



Muy Interesante / Estados Unidos / Martes 23 de mayo del 2017

El momento cumbre de la fertilización –la penetración del espermatozoide en el óvulo– puede impedirse con una sustancia presente en el áloe que no causa efectos secundarios, lo que sí ocurre en ocasiones con los tratamientos hormonales anticonceptivos. Este compuesto limita la motilidad de los gametos masculinos, que se quedan así sin el vigor suficiente para entrar en la célula reproductora femenina.

La sustancia, que se halla también en el arbusto Maytenus ilicifolia, nativo de Sudamérica, y en el diente de león, puede servir como anticonceptivo de emergencia tomado antes o después de la relación sexual, o permanente si se administra a través de un parche sobre la piel o un anillo vaginal. Según explican los autores del hallazgo, los espermatozoides humanos necesitan de cinco a seis horas para madurar en el sistema reproductivo femenino, lo que da tiempo a administrar este compuesto químico que bloquea su movilidad.

Barreras moleculares
La bióloga Polina Lishko, directora de la investigación, llama a estas sustancias vegetales "condones moleculares". Según explica en la web de su universidad, "bloquean la fertilización aun aplicadas en dosis muy bajas, diez veces menores que los niveles de levonorgestrel presentes en las píldoras del día después. Parece mejor opción usar un compuesto de origen vegetal, no tóxico y sin hormonas".

Las células sexuales masculinas navegan hacia el óvulo gracias a los movimientos rítmicos y regulares de su cola. Cuando están llegando a su objetivo, ese ritmo aumenta y los movimientos de su cola se tornan asimétricos para permitirles horadar la capa protectora del huevo, penetrar en él y fecundarlo. Los investigadores han descubierto que este proceso se desecadena por influjo de la progesterona, que abre los canales de calcio que dan paso al óvulo y estimula a los espermatozoides. También comprobaron que otra hormona –la pregnenolona– cumple el mismo papel.

Guiados por los pueblos indígenas
Una vez entendido este mecanismo, los científicos buscaron sustancias que cerraran el canal del calcio y disminuyeran la movilidad de los espermatozoides. Para ello repasaron los anticonceptivos naturales utilizados por pueblos indígenas de diversos lugares del mundo.

Identificaron dos compuestos –el lupeol y la pristimerina– que cumplían estas funciones. Se encuentran en plantas como el áloe, el diente de león, la Maytenus ilicifolia –usada como anticonceptivo natural en Paraguay–, la enredadera Tripterygium wilfordii –explotada por la medicina tradicional china para impedir los embarazos– y el mango.

Lishko y sus colegas trabajan con investigadores de Oregón para probar la efectividad anticonceptiva de estas sustancias en la fertilización in vitro en primates –hasta ahora solo se ha estudiado con el esperma humano–, y buscan una fuente barata de estos compuestos, ya que se hallan en concentraciones tan bajas en las plantas silvestres que extraerlos no resulta rentable.